Tras seis años de intentos, Venezuela finalmente logró ingresar como miembro pleno al Mercado Común del Sur (Mercosur), una oportunidad para desarrollar su potencial económico.
Pero el país no está en condiciones para competir con el resto de las naciones que conforman el bloque -Argentina, Brasil y Uruguay-, pues tiene un aparato productivo debilitado como consecuencia de las políticas económicas impulsadas por el Gobierno.
Francisco Martínez, segundo vicepresidente de Fedecámaras nacional y representante de la organización en Zulia, asegura que Venezuela entra en Mercosur con una condición de debilidad, ya que tiene poco que ofrecer y mucho que importar.
El dirigente empresarial advierte que los sectores productivos nacionales están a la expectativa, pues temen que los productos provenientes del mercado del sur quiten espacios a los locales.
El presidente del gremio en Zulia explica que existe una preocupación en los sectores como el avícola y el cárnico, porque temen que se eleven las importaciones de productos como pollo -de Brasil- y carne -de Argentina-, lo que sería perjudicial para la producción nacional.
"La industria avícola brasilera tiene una dimensión y eficiencia impresionante, que dejan en condiciones de minusvalía al sector local; entonces hay preocupación en el área y el Gobierno tiene la responsabilidad de proteger a sus productores, no a las empresas extranjeras".
Martínez afirma que el Ejecutivo debe crear un plan para promover la producción nacional, no para propiciar las actividades de las empresas fuera de las fronteras.
"En este momento Venezuela no está ingresando al Mercosur, sino que es el Mercosur el que está entrando a Venezuela. Esto lo que quiere decir es que se pueden aumentar las importaciones, porque lo único que le puede interesar a los otros países es el petróleo".
Fuente: Diario la Verdad
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